Pasadita por Napier

Tuvimos el agrado de conocer en Hastings a una pareja Chilena, Claudio y Michi, que están trabajando en el campo junto a nosotros. Aprovechamos su movilidad en auto para empezar a recorrer mas allá de las afueras de Hastings.

Arrancamos el fin de semana yendo el Sábado por la tarde a Napier, una ciudad bastante grande a comparacion de Hastings, ubicada a solo 20 Min. en auto.

La idea principal, la excusa del viaje, era ir a jugar a un minigolf que se encontraba allá.

Llegamos y nos fuimos a dar una vuelta a la calle principal de la ciudad, para nuestra sorpresa estaba todo muerto, los locales cerrados, no había gente en la calle y no había nada para hacer. Aprovechamos para conocer la playa que tenia esta ciudad y nos fuimos en busca del famoso minigolf.

(la playa y las calles desiertas de Napier)

Encontramos el Minigolf, pero estaba cerrado... seguimos caminando en busca de diversión y nos topamos con Laser Force!. una especie de Laser shot, pero mas rustico y al estilo Kiwi. Les paso a explicar de que se trata este juego.

En la década del 90 en la Argentina había varios locales de Laser shot, que luego con la crisis se vieron afectados a cerrar como muchos otros locales de comidas Yankis, Bancos etc.

Para los que no tubieron la suerte de ir a uno , el juego consistía en ponerse chalecos y armas que disparan rayos láser. Se arman dos equipos y te meten adentro de un cuarto con pasillos escondites y poca luz. Se cagan a tiros y el equipo que mas mata es el ganador.

Mientras tomábamos unas cervezas en el local y esperábamos nuestro turno para jugar, veíamos como gente de todas las edades salia chivadasima de jugar. Nosotros no lográbamos entender hasta ese momento a que se debía....o en realidad si, pero creíamos que no nos íbamos a cebar tanto para correr adentro y pasarla tan bien.

Una vez que estas adentro jugando te transformas, te crees rambo en el medio de la jungla, empezas a correr como si estuvieras en una guerra y es recién ahí que entendes porque la gente sale toda traspirada después de 15 minutos.

(la foto antes de entrar, un poco gay)

Seguro para mucho es una pelotudes, pero nos cagamos mucho de risa y me hizo acordar mucho a los tiempos dorados que teníamos con el patilludo en Argentina. Tiempos dorados insostenibles que duraron lo que tenían que durar hasta que se fue todo a la mierda.

Luego de eso emprendimos el retorno a Hastings con una pasada previa por BURGER FUEL a comer las mejores hamburguesas que hay en Nueva Zelanda.

Estos locales se encuentran en casi todas las ciudades importantes de NZ y te venden unos combos que quedas en coma, los locales tienen mucha onda y mas que hamburgeserias parecen boliches.